jueves, 28 de octubre de 2010

La tecnología ha generado impactos tan grandes en nuestras vidas que aun no somos capaces de dimensionar.

La degradación humana es un hecho, sujetos con menos idealismo, irracionales, insertos en una sociedad de consumo, con menos pensamiento critico, orientados hacer una marioneta más, dominados por un mundo más explotador y competente, logrando inconformidad y frustración penetrante en los individuos siempre esperando con un deseo de más, y no logrando la autosatisfacción.

Esto que ocurre con las nuevas tecnologías que en un principio nos parecían tan útiles, tan inofensivas esta creando serios cambios tanto en la forma de comunicarnos con los demás, afectando también en la forma de pensar de nosotros y sobre el mundo.

Como dice Heidegger, “el peligro aparece cuando hemos llegado al punto de depender del mundo técnico hasta hacernos nosotros mismos servidumbre de las obras técnicas creadas, y es lo que estaría ocurriendo”.[1]

El espectro de la tecnología están grande que aparte de invadirnos nuestra privacidad, nos ataca a nuestro propio cuerpo como lo que ingerimos.
El consumo de alimentos, disfrazados como tales, es cosa de mirar el rotulado de ciertos alimentos Aspartame, Tartrazina, Amarillo crepúsculo entre otros.
Nos parece cómodo hervir un poco de agua y colocar instantáneamente el famoso polvo mágico que el mercado nos ofrece como sopa, incrédulamente pensamos que es un alimento nutritivo, pero muy poco nos cuestionamos que es lo que realmente esta entrando en nuestros cuerpos.
Esto es lo que acarrea los avances tecnológicos, los costos que lleva esta vida futurista.


[1] Félix Romero Alejandro 2009, Avances, logros y consecuencias sobre la implantación de microchips en los seres humanos.http://www.scribd.com/doc/14578505/microchips-en-los-seres-humanos

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